The Legacy of Vicente Guerrero, Mexico’s First Black Indian President. Por Theodore G. Vincent. Gainesville: University Press of Florida, 2001, 336 p.

Tradicionalmente, historiadores publicaron desde una proyección panegírica ensayos biográficos o temáticos sobre diversos aspectos de la carrera política de Vicente Guerrero (Lafragua, 1987). En las últimas décadas del siglo XX, académicos de distintas disciplinas, centrados en revelar las raíces africanas y conectar las diásporas, resaltaron la importancia de visibilizar de forma cabal el papel de los afrodescendientes en la historia y la actualidad mexicana (Martínez, 1994). En esta búsqueda de la herencia africana, algunos se interesaron en la figura de Guerrero, ya que le atribuyeron la primera presidencia afromexicana. Aunque continuaron con una proyección panegírica, ofrecieron enfoques novedosos y, de esta manera, contribuyeron a explicar de una forma más compleja la historia de dicho personaje y el siglo XIX mexicano (Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México [INEHRM], 2021).

Esta obra de Theodore Vincent se inserta en la tendencia reivindicadora previa. Procura desvelar la herencia africana de, en primera instancia, Guerrero y, en segunda, personajes y eventos relacionados a él. Presenta una aportación significativa a los estudios históricos y afromexicanos, ya que despliega una minuciosa investigación que apremia a repensar distintos entretejidos de la vida de Guerrero, además de ideas, prácticas, personalidades, asociaciones y eventos decimonónicos. Tal contribución de ninguna forma fue anodina en la época en que fue publicada (2001), pues, entonces, los estudios mexicanistas de forma ocasional incorporaron la presencia africana, y todavía de forma más esporádica la centraron o celebraron.

Al examinar la herencia negra en la historia de Guerrero, Vincent se posiciona en una perspectiva analítica “racial”, la cual privilegia una apreciación personal (estadounidense, blanca, progresista, contemporánea), de esta manera, evidencia ciertos puntos débiles. En primera instancia, adopta una lectura de la “raza” de este personaje, circunscrita a la teoría hipodescendente de interpretación estadounidense; así, desestima la complejidad genealógica de éste. En segunda, ignora la diversidad de la palabra “raza” y no la contextualiza -ya que relega la existencia dinámica y plural de tal palabra, la cual se transforma según espacios y tiempos-. En las épocas novohispana y mexicana fundacional, las principales concepciones de raza estuvieron ligadas a ideas de estirpe, no a ideas de genética -herederas de la antropología científica del siglo XVIII europeo, que irradiaron a los siglos siguientes-. Igualmente, el autor omite considerar que en aquellas épocas los usos de la palabra “raza” eran secundarios a los de “linaje”, “casta” o “calidad”; además de que prescinde de explicar connotaciones, matices y relaciones entre los distintos usos.

Vincent lamenta que la disciplina histórica relegue la cuestión racial al estudiar la historia de Guerrero, de manera que asume la tarea de descubrirla. Desafortunadamente, evidencia algunas problemáticas en la manera en que privilegia tal cuestión. Primeramente, considera de forma reduccionista que la explicación racial estaría detrás de una gran mayoría de los aspectos significativos en la vida de este personaje. Enseguida, de manera extremadamente forzada, procede a “develar” la influencia negra y minimiza o ignora la mayoría de la documentación o interpretación que complejice, matice o cuestione la preminencia de tal influencia. De esta forma, mientras reivindica los rasgos afrodescendientes, paralelamente, anula otros rasgos, no solamente en la historia de Guerrero, sino del siglo XIX mexicano.

Según la concepción racial de Vincent, esta obra argumenta que la primera presidencia negra no tendría la consigna de implementar una agenda negra o afromexicana, sino organizar una coalición multirracial conformada por negros, indios y los mezclados de pieles obscuras de las castas. De forma que, mientras todos estos le apoyaron, los españoles europeos y americanos (los de pieles blancas) y los mezclados white-passing no. Desde esta perspectiva, plasma una imagen binaria de eventos históricos, pasados y futuros, en donde se enfrentan héroes y villanos -personas negras y cafés contra blancas, respectivamente-. Así, retorna a la historia de bronce, de hombres, perfectos/imperfectos, unidimensionales, ahora acomodada a razas y colores. Si los personajes son afrodescendientes o indios, o aliados blancos de afrodescendientes (“socially white”), son resaltados y elogiados, y si son españoles europeos o americanos, mayoritariamente, son cuidadosamente ignorados, minimizados, o vilipendiados.

Esta obra es marginal a los ámbitos académicos humanísticos y sociales. No dialoga con posturas historiográficas nodales, particularmente las mexicanistas, y tampoco procura revisión y discusión de estos pares; de manera que no pretende representar una investigación rigurosa adscrita a la disciplina histórica, sino una narrativa organizada de forma cronológica con ayuda de fuentes primarias y secundarias. Entonces, no adopta metodologías o propuestas analíticas de tal disciplina. Desde la perspectiva de ésta, presenta varios problemas. En primera instancia, Vincent selecciona únicamente ciertos textos acordes a la propia argumentación, sin mencionar o discutir los opuestos. En segunda, no realiza una crítica de fuentes primarias y secundarias consultadas, es decir, no se pregunta quiénes eran los autores y desde qué mirada analizaban personas, eventos, etc. Por último, continuamente recurre a afirmaciones infundadas, sobre-interpretaciones, omisiones y anacronías para adaptar las fuentes a la propia discursiva. De esta manera, conforma personajes y eventos a su narrativa dualista-colorista de buenos y malos. Presenta una proyección teleológica, en donde los primeros fueron dirigidos por una figura casi mitológica hacia la libertad. Así, plasma una imagen monolítica, no solamente de Guerrero, sino de la historia. Adjudica a este personaje y a los guerreristas logros realizados por varios individuos, sectores, movimientos y procesos; inclusive éxitos futuros, ya que les designa “avant la lettre” o “proto” de movimientos socialistas, progresistas, feministas, etc.

La obra tiene una organización cronológica y temática centrada, naturalmente, en la historia de Guerrero. Vincent traza una línea de su influencia desde la época novohispana hasta la actual, en donde busca explicar la gran importancia de dicha figura “olvidada” en la historia mexicana. Desarrolla los momentos principales en la vida de éste: jefatura en la revolución de independencia, labor pública en el Supremo Poder Ejecutivo (triunvirato) y la administración de Guadalupe Victoria, presidencia, contra-rebelión del Sur (en respuesta a la rebelión anti-guerrerista de Jalapa) y ejecución. No obstante, no se detiene en la muerte de Guerrero, puesto que éste no sucumbiría del todo, sino que permanecería hasta nuestros días al dejar una poderosa semilla sembrada. Así, continúa con la búsqueda de los frutos “guerreroristas”, los que, supuestamente, están conectados a personajes y eventos fundamentales de la historia mexicana; ya que considera que la herencia de Guerrero se encuentra detrás de la mayoría de los movimientos populares, por ejemplo, la movilización revolucionaria zapatista (1910) y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional [EZLN] (1983).

En los Estados Unidos Americanos, esta biografía goza actualmente de alguna relevancia en círculos académicos y no académicos interesados en personajes afromexicanos trascendentales (Milstead, 2019; Rivera, 2007; y Anónimo, 2020). No solo porque está escrita en inglés, sino porque apela a importantes simbolismos raciales estadounidenses. Especialmente, forma parte de la urgente lucha global por visibilizar a las personas afrodescendientes y atacar la violencia racista hacia las mismas. A pesar de los problemas señalados previamente, brinda otra oportunidad para fraguar diálogos interdisciplinarios y transfronterizos, no únicamente sobre la historia de Guerrero, sino la historia afromexicana y mexicana; e inclusive, las distintas concepciones de “raza”. Por otro lado, todavía queda pendiente revisitar la dimensión genealógica en la historia de Guerrero desde una proyección caleidoscópica, y así lograr una interpretación equilibrada y multidimensional que interconecte de forma cabal tal dimensión con los múltiples rasgos personales, socioculturales y políticos de Vicente Guerrero.

Bibliografía

ANÓNIMO. (enero 2020). Mexico Once Had a Black President -But He Was Executed! Black History. https://www.blackhistory.com/2020/01/mexico-black-president-vicente-guerrero.html

LAFRAGUA, J. M. (1987). Vicente Guerrero, ensayo biográfico. Gobierno del Estado de Guerrero/Porrúa.

MARTÍNEZ MONTIEL, L. M. (1994). Presencia africana en México. CONACULTA.

MILSTEAD, J. R. (2019). Afromexicans and The Making of Modern Mexico: Citizenship, Race, and Capitalism in Jamiltepec, Oaxaca (1821-1910) [Tesis de doctorado]. Michigan State University.

INEHRM. (10 de febrero 2021). Foro: 190 Aniversario luctuoso de Vicente Guerrero. Afrodescendientes en la Guerra de independencia [Archivo de Video]. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=CgIfcM5bWpM.

RIVERA, A. (22 de enero 2007). Vicente Guerrero (1783-1831). Black Past. https://www.blackpast.org/african-american-history/guerrero-vicente-1783-1831/